Iniciamos este día aceptando una gran verdad, los seres humanos somos cómodos por naturaleza, nos cuesta mantener nuestro máximo esfuerzo de forma prolongada, todos hemos vivido alguna vez: cuando en un proyecto ya hemos conseguido los objetivos principales, a continuación nos acomodamos y hacemos lo mínimo para que todo siga funcionando.
Solo si nos alejamos del conformismo y la falta de horizonte, somos capaces de hacer el esfuerzo suficiente, constancia y perseverancia, son elementos que nos acompañaran a lograr sueños y a permanecer generando resultados a largo plazo, pues no solo llegar, si no mantenerse, y continuar enfocado en el punto al que deseamos llegar.
Aplicamos la ley del mínimo esfuerzo en diversas áreas de nuestras vidas, no solo se trata de la parte del funcionamiento laboral , también prevalece este comportamiento en ámbitos tan diversos como:
- El cuidado del cuerpo y de nuestra salud personal.
- nuestra relación de pareja y/o hijos.
- la gestión de las amistades y del tiempo libre.
- objetivos intelectuales, artísticos e incluso espirituales.

No hay comentarios:
Publicar un comentario